R.- (moviendo la mano en círculo a la altura del mentón con actitud de profesor.) A diferencia de lo que el común de la gente cree, incluyendo catedráticos de la más diversa índole, el peor de los casos posibles, estadísticamente hablando, es tanto absoluto como completamente independiente del objeto de la medición.
(silencio en el resto de la mesa. El mozo que pasa a un lado deja de atender las mesas para oir.)
R.- No es, obviamente, el 0% de probabilidad, ya que este valor se relaciona directamente con los resultados favorables o no favorables del cálculo en cuanto a la predicción, o en otros términos, al resultado númerico de un mero proceso matemático.
(R. se pone de pie y el resto del bar comienza a mirarlo intrigado. Incluso H. que está detrás de la barra, se asoma sobre ella.)
R.- El peor de todos los casos posibles es cuando existe una posiblidad verdadera entre dos opciones. O sea, el 50%. La primer objeción que suele encontrar esta afirmación es que si, por ejemplo, estoy jugando a la ruleta y apuesto a color (rojo o negro), tengo más posibilidades de acertar que si apuesto a un pleno (un número entre los 36 posibles) lo que haría de éste y no aquel el peor caso. (Elevando la voz.) El error en que se incurre al plantear ésta y otras afirmaciones similares, es en confundir el resultado de la matematica como ciencia, con no más que una herramienta. La estadística tiene por objeto la predicción, asi como todo el conocimiento matemático, el cual nace como extensión del primer concepto como tal que despierta en el ser humano, el del antecedente y consecuente. (Lentamente.) Tener un 30% de probabilidades de que A ocurra, significa inmediatamente que todo lo que no sea A tiene un 70% de probabilidades de ocurrir, incluyendo esto que no ocurra nada. Por lo tanto, mas alla de que A ocurra o no, la estadística como ciencia puede decirnos que es más probable que ocurra todo lo que no es A. Por la misma razón, el hecho de tener 0% de probabilidades de que P ocurra, no es el peor resultado posible, ya que la estadística nos asegura que existe un 100% de probabilidades de que ocurra todo lo que no es P, Lo cual, (sílaba por sílaba.) no es poco.(Silencio corto.) Esto hace que la estadística como ciencia sea independiente tanto del resultado numérico en general como de el caso práctico en particular. (Mira en redondo ostentosamente para asegurarse que no quede nadie sin oír la conclusión)
En cambio si A tiene un 50% de probabildaes de ocurrir, todo lo que no es A también y es el grado máximo de incerteza esperable. No se puede predecir nada. En lo que refiere a estadística, el valor nulo no es el cero, sino la mitad. Este valor nulo lo es tal en la medida en que si se le pregunta a la estadística que es más probable, A o todo lo que no es A, ella nos contesta (Triunfante.):- no se...
(Todos se ponen de pie, y aplauden fervorosamente. Q. y S. lloran desconsolados en el piso emocionados. N. se desmaya y M. la toma por la falda y la arrastra hacia los baños. R. se calza su galera, hace una vuelta carnero, alza los brazos en V y hace mutis por la derecha)
(silencio en el resto de la mesa. El mozo que pasa a un lado deja de atender las mesas para oir.)
R.- No es, obviamente, el 0% de probabilidad, ya que este valor se relaciona directamente con los resultados favorables o no favorables del cálculo en cuanto a la predicción, o en otros términos, al resultado númerico de un mero proceso matemático.
(R. se pone de pie y el resto del bar comienza a mirarlo intrigado. Incluso H. que está detrás de la barra, se asoma sobre ella.)
R.- El peor de todos los casos posibles es cuando existe una posiblidad verdadera entre dos opciones. O sea, el 50%. La primer objeción que suele encontrar esta afirmación es que si, por ejemplo, estoy jugando a la ruleta y apuesto a color (rojo o negro), tengo más posibilidades de acertar que si apuesto a un pleno (un número entre los 36 posibles) lo que haría de éste y no aquel el peor caso. (Elevando la voz.) El error en que se incurre al plantear ésta y otras afirmaciones similares, es en confundir el resultado de la matematica como ciencia, con no más que una herramienta. La estadística tiene por objeto la predicción, asi como todo el conocimiento matemático, el cual nace como extensión del primer concepto como tal que despierta en el ser humano, el del antecedente y consecuente. (Lentamente.) Tener un 30% de probabilidades de que A ocurra, significa inmediatamente que todo lo que no sea A tiene un 70% de probabilidades de ocurrir, incluyendo esto que no ocurra nada. Por lo tanto, mas alla de que A ocurra o no, la estadística como ciencia puede decirnos que es más probable que ocurra todo lo que no es A. Por la misma razón, el hecho de tener 0% de probabilidades de que P ocurra, no es el peor resultado posible, ya que la estadística nos asegura que existe un 100% de probabilidades de que ocurra todo lo que no es P, Lo cual, (sílaba por sílaba.) no es poco.(Silencio corto.) Esto hace que la estadística como ciencia sea independiente tanto del resultado numérico en general como de el caso práctico en particular. (Mira en redondo ostentosamente para asegurarse que no quede nadie sin oír la conclusión)
En cambio si A tiene un 50% de probabildaes de ocurrir, todo lo que no es A también y es el grado máximo de incerteza esperable. No se puede predecir nada. En lo que refiere a estadística, el valor nulo no es el cero, sino la mitad. Este valor nulo lo es tal en la medida en que si se le pregunta a la estadística que es más probable, A o todo lo que no es A, ella nos contesta (Triunfante.):- no se...
(Todos se ponen de pie, y aplauden fervorosamente. Q. y S. lloran desconsolados en el piso emocionados. N. se desmaya y M. la toma por la falda y la arrastra hacia los baños. R. se calza su galera, hace una vuelta carnero, alza los brazos en V y hace mutis por la derecha)
TELÓN FINAL
Dr. Kahlköpfig Würstchenbrot
"El inasible" - Ed . Lüge
"El inasible" - Ed . Lüge
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